A veces hablamos de las preferencias o tendencias de los clientes sin tener en cuenta un factor clave: la edad. Un cliente de 25 no suele buscar ni demandar lo mismo que uno de 75.

Hay muchos ámbitos de un negocio de restauración susceptibles de adaptarse al público según su edad. Estética, oferta gastronómica, música… ¡e incluso servicio! Hay bares más tradicionales con camareros de uniforme de camisa y pajarita y que tratan de usted. También hay restaurantes con autoservicio y música pop de fondo. En la variedad está el gusto, pero es obvio que el factor de la edad también influye en todos estos detalles que definen la personalidad del establecimiento.

No obstante, el público joven tiene mucho potencial para mejorar los beneficios de casi todo establecimiento. Generalmente, sus hábitos de consumo incluyen bastante ocio (entre los que destaca la hostelería), y tienen más tiempo libre que gente de mayor edad. Y además, muchas veces ese ocio se disfruta en grupo. Sin embargo, eso no significa que sean fáciles de “atraer” a un negocio de restauración. Hay que adaptarse a sus demandas y diferenciarse de la competencia para llamar su atención.

A continuación, te ofrecemos algunos consejos para atraer a clientela joven a tu restaurante o bar. Seguro que puedes aprovechar alguno para adaptar tu negocio y ampliar o especializar tu público objetivo.

1.   Internet como aliado imprescindible

Se suele decir que “Lo que no se comunica, no existe”. ¿Y cuál es el medio de comunicación más inmediato que tenemos hoy en día? Internet. Internet en todas sus formas: páginas web, plataformas, redes sociales… Cada una de estas áreas debe ser nuestra aliada para tener una presencia digital accesible para todo el mundo. Pero, si nuestra presencia digital ya es importante en general, para la juventud es el primer paso. Las generaciones más jóvenes tienen una conexión mayor con lo digital, por lo que invertir esfuerzo en ese ámbito es ganar visibilidad para ellos. Y esto incluye ofrecer wifi gratis en nuestro local.

La geolocalización y las buenas críticas de otros clientes son las grandes claves para directorios y plataformas online. Son consultadas constantemente en busca de restaurantes, bares y coctelerías. Y es la primera opción de muchos clientes potenciales para investigar la oferta en zonas concretas.

Las redes sociales son el escaparate de tu establecimiento y de tu oferta gastronómica. No solo serán consultadas por clientes potenciales cuando se interesen por tu negocio. También son una oportunidad de oro para llamar la atención. Presta atención a la apetitosa presentación de tus platos, la elección de hashtags y la interacción con tus usuarios.

Una página web completa que incluya menú, fotografías y buen storytelling, te ayudará a ofrecer una imagen favorable en tu propia página.

Por todas estas razones, asegúrate de tener cubiertos estos tres flancos. Todos son una oportunidad para generar confianza para un público que pasa mucho tiempo en internet y no se suele aventurar a elegir un restaurante sin comprobar su presencia digital antes.

2.   Experiencia, no solo gastronomía

Como ya hemos comentado en otras ocasiones, hoy en día los clientes buscan una experiencia más allá de la gastronomía. Hay que trabajar en nuestros platos, no hay duda. Pero también hay que cuidar otros factores como la decoración o la oferta cultural del propio local.

En consonancia con el consejo anterior, la estética de un establecimiento también ha de ser fotogénica. Las redes sociales son interactivas. Te conviene cuidar la imagen de tus productos y de tu decoración para que, además, ganen visibilidad mediante las redes sociales de tus propios clientes.

Por otra parte, la experiencia que buscan pasa por nuestra diferenciación como negocio. Música en directo, exposiciones de arte y fotografía, recital de poesía, intercambios de idiomas… Nuestro establecimiento puede ser partícipe y escenario de una gran oferta cultural. Podemos reservar esas actividades a tardes puntuales y publicitarlos.

3.   Precios económicos

Sí, los jóvenes suelen ser grandes consumidores de ocio y hostelería. Pero también tienen generalmente menor poder adquisitivo que los clientes de mediana edad. Es la edad en la que están cursando sus estudios o simplemente tienen salarios más bajos, por lo que la carta ha de mostrar precios que se puedan permitir.

4.   Tendencias gastronómicas en la carta

Desde poke hawaiano a brunch, pasando por baos y tacos. Aprovecha las modas gastronómicas para ampliar tu carta. Eso sí, de una manera estudiada y que no interfiera con tu imagen de marca. A veces estas tendencias culinarias vienen de países exóticos y otras veces se vuelven a poner de moda platos tradicionales. En cualquier caso, estate atento/a  todas las novedades para aprovechar la curiosidad de los jóvenes.

5.   Alternativas vegetarianas

Entre la población vegetariana, flexitariana y vegana del país, hay un gran porcentaje de jóvenes. Y además, son dietas que cada vez tienen más popularidad. Precisamente porque los jóvenes suelen disfrutar del ocio y de la hostelería en grupo, hacer nuestra carta más inclusiva con opciones vegetarianas. Señalízalas para que sean fáciles de localizar en el menú.

Seguro que estos consejos te ayudan a conseguir una clientela más joven. Y a satisfacer las demandas de una generación que suele consumir mucho en hostelería.