En la gastronomía, como en otros muchos ámbitos, para gustos, colores. Sea como fuere, hay alimentos y comidas raras que la mayor parte de paladares rechazarían sin dudarlo.

Estos son 5 de los alimentos más raros de todo el mundo, desde unas plantas carnívoras, pasando por vesículas de pez globo, hasta un pulpo al que si no lo masticas mucho, podría llegar a ahogar a un humano.

Algunos alimentos, por mucho que nuestro jefe de cocina los prepare con esmero, como eso de atreverse con la poco agraciada lamprea gallega, por ejemplo, lo más probable es que sean rechazados por muchos paladares, nacionales o extranjeros. Manjares para algunos, algo inconcebible para otros, como todo en la vida (y más aún en la gastronomía) todo depende de cómo y con qué ojos los miremos.

5 comidas raras

Nepenthes

Las llamadas nepenthes son plantas carnívoras que se encuentran en mayor cantidad en Australia, Borneo, Sumatra y Guinea. Estas curiosas plantas con forma de saco, segregan un néctar muy dulce que atrae a los insectos quedando atrapados y devorados en su interior. Lo curioso es que en Borneo secan estas bolsitas y las rellenan de arroz. Después cuecen esa jarritas y añaden zumo de coco.

Shirako

Una de las comidas raras más caras. Su precio puede alcanzar los 300-500€ por ración. Dicho así, este es uno de los alimentos raros que se podrían considerar un manjar de la gastronomía japonesa. Lo complicado de asimilar tal lujo es saber que se trata de vesículas de un pez globo, en concreto, el semen del pez llamado Fugu. Su textura gelatinosa y blanquecina, para que engañarnos, no ayuda demasiado.

Blighia sápida

Anaranjada por fuera, terrible por dentro. Esta fruta de origen africano con un angelical aspecto de tulipán, recibe multitud de nombres como “seso vegetal”, y esconde en su interior es un altísimo nivel de toxicidad. A pesar del exotismo de su aspecto externo, esta fruta solo puede comerse cuando realmente está madura. Si se ingiere antes, puede producir la muerte. Hay que esperar a que la fruta se abra por sí misma y descartar las semillas.

Sannakji

Mastica todo lo que puedas. Tritúralo en tu boca o un pedazo de tentáculo puede acabar ahogándote. El sannakji, un tipo de pulpo coreano, se come… vivo. Los comensales lo “atrapan” y lo mastican mientras el pulpo aún está vivo. Pero cuidado porque las ventosas pueden adherirse y asfixiarte. Se puede comer “entero”, a trozos o en brocheta.

Casu marzu

En la isla de Cerdeña llevan siglos preparando este queso con larvas. Sí, con huevas de una mosca llamada Piophila casei, temida entre los productores de queso… excepto de este. Se introducen para que ayuden a una más rápida fermentación del queso. La Unión Europea prohibió su venta pero en Italia se sigue produciendo aunque no es posible conseguirlo de forma legal. Lo más raro es que para saborear correctamente este queso, lo ideal es que las larvas aún estén vivas.

Está claro que la gastronomía es una cuestión cultural, aprendizaje al fin y al cabo, así que antes de juzgar, o de darlos a probar estos alimentos a tus clientes, deberías probarlos, ¿no crees?